Aunque no dispongamos de un espacio muy amplio en el exterior, no tenemos por que renunciar a tener un pequeño jardín.
Podemos agrupar pequeñas macetas para conseguir un efecto de espacio frondoso, para esto lo mejor es tener plantas de diferentes tipos:
Plantas altas para que den altura a nuestra composición.
Plantas de porte medio con flores que le den colorido.
Y plantas rastreras o colgantes que completen la composición.
Si lo hacemos así obtendremos un jardín en miniatura y bastante espectacular.

¿Como elegir las macetas?

Las macetas pueden ser de diferentes materiales:
Los tradicionales (piedra y terracota)
Otros (plástico, metal, madera u hormigón)
La opción es bastante libre ya que cualquier opción tiene sus ventajas e inconvenientes:
Las macetas de plástico son limpias, no pesan, son fáciles de manejar y son más baratas aunque se hacen quebradizas con el tiempo.
Las macetas de barro es bueno para las plantas grandes ya que aporta peso para mantener el equilibrio y duran más que las de plástico.

Encontraremos en el mercado una amplia gama de colorido y formas, ahí es donde podemos personalizar nuestro rincón.


¿Macetas o maceteros?

Tenemos que fijarnos si lo que vamos a adquirir es una maceta o un macetero, cualquiera de las dos opciones es buena siempre que tengamos presente, que las macetas deben llevar suficientes orificios para un buen drenaje y que los maceteros debemos colocarle piedrecitas debajo para no encharcar las plantas o llevar mucho cuidado con el riego.


¿Como elegir el tamaño?

El tamaño de la maceta debe ser proporcionado a la planta, no debemos plantar en tamaños excesivamente grandes a no ser que vayamos a realizar una composición.
Ya que nos estaría ocupando un espacio innecesario y la planta no destacaría.
Cuando compremos una planta la podemos cambiar a un tamaño superior la maceta o macetero no debe restarle importancia a nuestra planta sino complementar su vistosidad.